Oizaki Keiichiro [R]

¿Cómo es Keiichiro? Quien se acerque a él de buenas a primeras y pretenda tratar con él, posiblemente se encuentre con un muchacho parco en palabras que no se anda con rodeos, capaz de hablar con desdén a cualquiera que le moleste en lo más mínimo o se ponga en su camino. Rara vez se muerde la lengua y su tono suele ser seguro, cortante incluso. Es frío, maduro y muy inteligente para su edad, pero no calculador ni malintencionado. Con quienes tiene una relación formal tales como profesores o empleados públicos, se comporta de manera fría, pero educada. Con el resto del mundo es simple y llanamente un borde.

Si quiere decir algo, lo dirá sin rodeos y en muchas ocasiones sin pararse a pensar en la reacción o sentimientos de quién le escuche. Por otro lado sólo es abiertamente arisco con aquellos que consiguen molestarle. A pesar de todo, es bastante reservado, no le gusta hablar de sí mismo y actúa con calma en situaciones desfavorables (que son muchas).

Es sumamente maniático y ordenado, mostrando en ocasiones síntomas propios de TOC. Es capaz de pasar horas ordenando sus pertenencias de manera meticulosa como si de un entretenimiento más se tratara. Tampoco tiene muchas pertenencias, así que rara vez dedica tantísimo tiempo, la verdad. Dejando esto de lado, no tiene muchas más manías aparte de colocar su comida antes de comer y tocar las cuatro esquinas de su ordenador portátil antes de usarlo , además no debemos olvidar de la multitud de pequeños comportamientos destructivos que repite y que atentan contra la integridad de muchas de sus pertenencias.

Llama la atención que, a pesar de su comportamiento por norma frívolo, pocos son los que se ganan el dudoso honor de ponerse en su punto de mira y  ser el foco de su desprecio. No es egocéntrico ni engreído, se conoce lo bastante para conocer también sus fallos y puntos fuertes, por lo qu no se ofende con facilidad. Es complicado sacarle de sus casillas, incluso teniendo en cuenta la poca paciencia que tiene. Quien consiga molestarle sólo ganará una reprimenda, un tortazo, una retahíla de insultos o el más opaco de los silencios incómodos.