Conectarse
Últimos temas
Afiliados
Créditos del Foro
» Skin obtenido de Captain Knows Best creado por Neeve, gracias a los aportes y tutoriales de Hardrock, Glintz y Asistencia Foroactivo.
» Demás Créditos del Foro. |
Baile en la noche
Página 1 de 1.
Baile en la noche
Baile en la noche
Viernes, nueve de la noche. Ya está anocheciendo en Ahsford y la inmensa mayoría de parejas ya han ido a sus citas. Por otra parte, los organizadores de los grupos de citas a ciegas han decidido enviar a los diferentes participantes a diferentes lugares para que intenten relacionarse lo mejor posible entre los estudiantes y… quién sabe, puede que haya algo más que una simple amistad, ya que es la finalidad de todo este movimiento.
Vosotros habéis sido enviados a un salón de baile media hora antes del gran evento. En una sala de descanso con sillones y demás asientos para descansar después de la feria, hay un banco en especial que llama la atención debido a que emite lucecitas de color rosa. Se os ha dicho que allí encontraréis a la que puede que sea vuestra pareja destinada debido a la atención que atrae. Se estima que el aforo para el salón de baile, junto con una orquesta, estará cerca de su plenitud legal, así como que el tema principal del baile será el vals. Además, incluso antes del baile en sí, se puede observar como diferentes trabajadores van repartiendo bebidas, tanto alcohólicas como no alcohólicas, y alimentos, haciendo que la velada sea lo más agradable posible para todos, bailen o no. En cuanto a los gastos, cabe destacar que en vuestra entrada al lugar vienen todos los gastos cubiertos.
Reglas del evento
1) El tema que deberán responder antes que los demás que tengan será el del evento, porque tiene una fecha límite.
2) No se pueden abandonar los temas.
3) Al menos 2 contestaciones por semana.
Invitado- Invitado
Re: Baile en la noche
Se encontraba rodando en su cama del aburrimiento, a pesar de haberse inscrito en el evento de citas a ciegas de la academia, parecía ser que para él no habría una cita aquella noche, la hiperactividad le hacía retorcerse en la cama, y ante la dicha de no tener nada que hacer, saltó de su sitio para darse un muy caliente baño.
Luego de salir de lo que parecía un sauna debido al calor que emanaba el cuarto, el pelirrojo (¿o pelinaranja?) salió del baño sin peinarse, secándose cautelosamente mientras tomaba la ropa limpia que había dejado en la cama, notando así algo bastante extraño y peculiar: Había una carta justo frente a la puerta de su cuarto, como si alguien la hubiese deslizado o algo por el estilo; la curiosidad le hizo acercarse a esta para leer su contenido, notando que no solo había elegido el mejor momento para tomarse un baño, sino que al parecer si tendría una cita a la que atender aquel día.
Lamentablemente tuvo que dejar la ropa que tenía en la cama justo ahí, pues tendría que vestirse de una forma un poco mas formal acorde a las especificaciones de la carta, lamentablemente, lo mas formal que tenía era un traje -completamente- blanco que hacía par con una corbata negra que llevaría como lazo. Recordó las palabras que le había dicho Shelly hace mucho sobre su belleza, lo cual le hizo sonrojar y bajar la cabeza poco antes de tomar un respiro, además del valor necesario para exhibir su rostro en público, algo que solo hacía cuando usaba magia.
Se tocó la frente para erizar su cabello con una pequeña descarga eléctrica, usando aquello como base para su peinado anti-gravedad ante la ausencia de gominas o cualquier otro tipo de gel para el cabello, de allí, solo faltaba vestirse y salir al sitio indicado por la carta. Lo primero que llamó su atención fue un banco con luces rosadas, algo un poco extraño y fuera de sitio considerando el ambiente clásico que tenía el sitio, probablemente ese era el sitio al que tenía que ir, pero primero, y por cuestión de no lucir desesperado, salió directamente a la barra a pedir una Pepsi antes de dirigirse al sitio que--Por lo que asumió--debía estar sentado.
Abrió la lata para darle un silencioso sorbo, apoyando su pierna izquierda sobre el codo derecho mientras esperaba a que alguien se sentara a su lado.. Habría sido lindo que le dijeran una frase clave o algo por el estilo para saber si no se había equivocado de sitio o de pareja, pero bueno, por algo era una cita a ciegas.
Luego de salir de lo que parecía un sauna debido al calor que emanaba el cuarto, el pelirrojo (¿o pelinaranja?) salió del baño sin peinarse, secándose cautelosamente mientras tomaba la ropa limpia que había dejado en la cama, notando así algo bastante extraño y peculiar: Había una carta justo frente a la puerta de su cuarto, como si alguien la hubiese deslizado o algo por el estilo; la curiosidad le hizo acercarse a esta para leer su contenido, notando que no solo había elegido el mejor momento para tomarse un baño, sino que al parecer si tendría una cita a la que atender aquel día.
Lamentablemente tuvo que dejar la ropa que tenía en la cama justo ahí, pues tendría que vestirse de una forma un poco mas formal acorde a las especificaciones de la carta, lamentablemente, lo mas formal que tenía era un traje -completamente- blanco que hacía par con una corbata negra que llevaría como lazo. Recordó las palabras que le había dicho Shelly hace mucho sobre su belleza, lo cual le hizo sonrojar y bajar la cabeza poco antes de tomar un respiro, además del valor necesario para exhibir su rostro en público, algo que solo hacía cuando usaba magia.
Se tocó la frente para erizar su cabello con una pequeña descarga eléctrica, usando aquello como base para su peinado anti-gravedad ante la ausencia de gominas o cualquier otro tipo de gel para el cabello, de allí, solo faltaba vestirse y salir al sitio indicado por la carta. Lo primero que llamó su atención fue un banco con luces rosadas, algo un poco extraño y fuera de sitio considerando el ambiente clásico que tenía el sitio, probablemente ese era el sitio al que tenía que ir, pero primero, y por cuestión de no lucir desesperado, salió directamente a la barra a pedir una Pepsi antes de dirigirse al sitio que--Por lo que asumió--debía estar sentado.
Abrió la lata para darle un silencioso sorbo, apoyando su pierna izquierda sobre el codo derecho mientras esperaba a que alguien se sentara a su lado.. Habría sido lindo que le dijeran una frase clave o algo por el estilo para saber si no se había equivocado de sitio o de pareja, pero bueno, por algo era una cita a ciegas.
Invitado- Invitado
Re: Baile en la noche
Estaba nerviosa, la verdadera razón por la que me había escrito a esta cosa extraña de San Valentín es porque esperaba que me tocara con determinada persona que nunca aceptaría una cita conmigo, la razón, desgraciadamente no le gustaban las chicas, eso era peor de que no tuviera ni un sentimiento por mí. En fin, igualmente las posibilidades eran mínimas, pero había una buena parte de todo esto, podría ir conocer a un posible nuevo amigo y distraerme de todo este asunto de Sam aunque sea por una noche.
Tranquilamente leí la carta donde me decían los detalles sobre cómo debía ir, era un poco difícil, un baile… no era buena con esas cosas. Pero en fin, solo entré a la ducha rápidamente, que según la hora citada ya estaba un poco tarde. Me encargué de secarme mi larga cabellera oscura. Aun con la toalla atada alrededor de mi cuerpo, fui a buscar unos zapatos y un vestido que tenía ahí para momentos especiales. Ya que era una cita a ciegas elegante, en un salón al parecer, la hacía una ocasión especial. Me puse rápidamente el vestido y unos zapatos con un taco no muy alto. Ahora era el turno de mi cabello, no sabía qué hacerle, probé muchas cosas, un moño, un semi-moño, una trenza de lado un poco despeinada. Nada me convencía, así que al final me lo dejé suelto. Definitivamente prepararme tanto no iba conmigo. Me acomodé los lentes, viéndome una última vez en el espejo. Estaba lista.
Al salir no me llevé casi nada, solo el celular en un pequeño bolso de mano, pero lo puse en silencio, hoy me resistiría a ver cualquiera de esos blogs, sitios web y demás que me recordaran cosas que no quería en esta noche.
El lugar era enorme y estaba lleno de gente. — Woow. — Fue lo que dije con una sonrisa en el rostro, ni bien entré por la puerta del lugar. Es que era simplemente un hermoso lugar, había muchas parejas bailando en medio del salón y yo no sabía a dónde ir. Me encontraba un poco perdida, pero bueno solo tenía que buscar con la vista algo que me indicara como saber con quién debía pasar la noche en una cita en el salón. Y lo vi, a un sillón a un lado, era un poco peculiar la forma en que llamaba la atención. Solo me acerqué, tal vez iba tarde y no sabía, había olvidado la hora en qué decía la tarjeta.
En efecto, pude comprobar que no había sido Sam el que había sido elegido, en cuanto me acerqué más. Bueno, eso lo sabía de anticipación, la suerte para que eso pasara debía ser demasiada, pero estaba bien siempre y cuando sea divertido, la verdad esperaba que fuera divertido, me tocara quién me tocara. — ¡Hola! — Saludé animadamente a la persona en el sillón. — Siento la demora. ¿Esperaste mucho? — Dije amablemente mientras me sentaba a su lado y lo miraba esperando su respuesta. Ojalá no sea tarde, eso me dejaría muy mal.
Tranquilamente leí la carta donde me decían los detalles sobre cómo debía ir, era un poco difícil, un baile… no era buena con esas cosas. Pero en fin, solo entré a la ducha rápidamente, que según la hora citada ya estaba un poco tarde. Me encargué de secarme mi larga cabellera oscura. Aun con la toalla atada alrededor de mi cuerpo, fui a buscar unos zapatos y un vestido que tenía ahí para momentos especiales. Ya que era una cita a ciegas elegante, en un salón al parecer, la hacía una ocasión especial. Me puse rápidamente el vestido y unos zapatos con un taco no muy alto. Ahora era el turno de mi cabello, no sabía qué hacerle, probé muchas cosas, un moño, un semi-moño, una trenza de lado un poco despeinada. Nada me convencía, así que al final me lo dejé suelto. Definitivamente prepararme tanto no iba conmigo. Me acomodé los lentes, viéndome una última vez en el espejo. Estaba lista.
Al salir no me llevé casi nada, solo el celular en un pequeño bolso de mano, pero lo puse en silencio, hoy me resistiría a ver cualquiera de esos blogs, sitios web y demás que me recordaran cosas que no quería en esta noche.
El lugar era enorme y estaba lleno de gente. — Woow. — Fue lo que dije con una sonrisa en el rostro, ni bien entré por la puerta del lugar. Es que era simplemente un hermoso lugar, había muchas parejas bailando en medio del salón y yo no sabía a dónde ir. Me encontraba un poco perdida, pero bueno solo tenía que buscar con la vista algo que me indicara como saber con quién debía pasar la noche en una cita en el salón. Y lo vi, a un sillón a un lado, era un poco peculiar la forma en que llamaba la atención. Solo me acerqué, tal vez iba tarde y no sabía, había olvidado la hora en qué decía la tarjeta.
En efecto, pude comprobar que no había sido Sam el que había sido elegido, en cuanto me acerqué más. Bueno, eso lo sabía de anticipación, la suerte para que eso pasara debía ser demasiada, pero estaba bien siempre y cuando sea divertido, la verdad esperaba que fuera divertido, me tocara quién me tocara. — ¡Hola! — Saludé animadamente a la persona en el sillón. — Siento la demora. ¿Esperaste mucho? — Dije amablemente mientras me sentaba a su lado y lo miraba esperando su respuesta. Ojalá no sea tarde, eso me dejaría muy mal.
Invitado- Invitado
Re: Baile en la noche
¿Cuanto tiempo había pasado..? Jamás lo podría saber, pues me había distraído tanto con la decoración de la habitación que simplemente había perdido la noción del tiempo, si bien bebí de la Pepsi que había pedido, quizás fue por cuestión de instinto, pues estaba tan hipnotizado, tan distraído que no había forma en la que hubiese hecho algo mas que observar mi alrededor.
Pero algo me sacó de mi trance, y ese algo resultó ser una chica de cabello verde, lastimosamente para mi, no podía saludarla, pues tenía liquido en mis labios y tuve que tragar rápidamente, lo cual me llevó a cubrirme los labios y toser, quizás por haber bebido demasiado rápido; a juzgar por lo que quedaba en la lata, no había pasado mucho tiempo, lo cual resultó en una sorpresa agradable.-La verdad, recién voy llegando- contesté a la par que me rascaba la nuca, riendo a pesar de la pena que sentía luego de haber mostrado cierta prisa para responder.
Me sonrojé por unos momentos al verle vestida de forma tan elegante, sin embargo cuando una pequeña vocecilla me recordó que desde el ambiente hasta la hora en la que ambos nos habíamos encontrado, así como las invitaciones que habían recibido indicaban que debíamos ir con ropa formal, lo cual me llevó a recordar que incluso yo estaba vestido de esa forma. Aparté la lata para darle mas espacio y traté de mantener mi sonrisa, lastimosamente para mi, mis habilidades sociales eran las mismas que las de un infante, pero traté lo posible para hacer que eso no se notara.
-M-me llamo Ulrich Blitzberg ¿y tu?- pregunté como si le hablara al aire, mirándole a la cara ni de forma muy fija ni de forma desinteresada ¿Es lo que uno hacía al conversar en privado, no? Aun así. Un pensamiento que sin duda alguna se me hacía irrelevante cruzó mi mente: Había mostrado mis poderes no en una sino en dos ocasiones, la primera vez cuando alguien intentó golpearme en los pasillos frente a Shelly, y la segunda en pleno centro comercial, cuando discretamente ayudé a la pseudo-heroína e indiscretamente usé magia para cambiar mis ropas (aunque esto último fuese por accidente).. ¿Se habrán esparcido rumores sobre mi en la academia? ... ¿Tendría que darle mi peso a Shelly en chocolate para que me ayudara a mantener el hecho de que soy un mago en secreto de nuevo? ¿Tendré que acostumbrarme a que todos hagan la broma del conejo en el sombrero..?¿Habrán leído estas preguntas cual presentador de televisión al anunciar el final de un capitulo de x serie?
Pero algo me sacó de mi trance, y ese algo resultó ser una chica de cabello verde, lastimosamente para mi, no podía saludarla, pues tenía liquido en mis labios y tuve que tragar rápidamente, lo cual me llevó a cubrirme los labios y toser, quizás por haber bebido demasiado rápido; a juzgar por lo que quedaba en la lata, no había pasado mucho tiempo, lo cual resultó en una sorpresa agradable.-La verdad, recién voy llegando- contesté a la par que me rascaba la nuca, riendo a pesar de la pena que sentía luego de haber mostrado cierta prisa para responder.
Me sonrojé por unos momentos al verle vestida de forma tan elegante, sin embargo cuando una pequeña vocecilla me recordó que desde el ambiente hasta la hora en la que ambos nos habíamos encontrado, así como las invitaciones que habían recibido indicaban que debíamos ir con ropa formal, lo cual me llevó a recordar que incluso yo estaba vestido de esa forma. Aparté la lata para darle mas espacio y traté de mantener mi sonrisa, lastimosamente para mi, mis habilidades sociales eran las mismas que las de un infante, pero traté lo posible para hacer que eso no se notara.
-M-me llamo Ulrich Blitzberg ¿y tu?- pregunté como si le hablara al aire, mirándole a la cara ni de forma muy fija ni de forma desinteresada ¿Es lo que uno hacía al conversar en privado, no? Aun así. Un pensamiento que sin duda alguna se me hacía irrelevante cruzó mi mente: Había mostrado mis poderes no en una sino en dos ocasiones, la primera vez cuando alguien intentó golpearme en los pasillos frente a Shelly, y la segunda en pleno centro comercial, cuando discretamente ayudé a la pseudo-heroína e indiscretamente usé magia para cambiar mis ropas (aunque esto último fuese por accidente).. ¿Se habrán esparcido rumores sobre mi en la academia? ... ¿Tendría que darle mi peso a Shelly en chocolate para que me ayudara a mantener el hecho de que soy un mago en secreto de nuevo? ¿Tendré que acostumbrarme a que todos hagan la broma del conejo en el sombrero..?
Invitado- Invitado
Re: Baile en la noche
Me había apurado un poco, no recordaba la hora en que tenía que hacer las cosas, que tonta era a veces, me golpeé levemente la frente con la palma de mi mano mientras no me veía, tenía sed y estaba cansada, por eso me senté a su lado y pregunté eso. Me respondió que no era mucho lo que esperaba, eso era bueno, suspiré aliviada. Por suerte no lo había hecho esperar, es que enserio, había perdido la noción del tiempo. Una vez que me relajé iba a decirle algo, la verdad eso me ponía nerviosa, no soy de hablar mucho con personas desconocidas, pero bueno. De todas formas él se adelantó a hablarme.
— ¡¡Hola!! de nuevo. — Dije comenzando animada y luego lo otro en voz baja. — Un gusto, Ulrich. Soy Cristie Schmidt. — Agregué con una sonrisa. Y luego de meditarlo por un momento. — ¿Cómo estás? — Tal vez podía empezarlo como un chat, solo que hablando, aunque lástima que en una conversación no se pudieran poner mis lindos emoticones. En fin, esto era un intento.
Aún seguía teniendo sed, por lo que al terminar de decir eso, solo me agarré la garganta en reflejo, buscando donde podría conseguir algo para tomar. — Por cierto. — Mencioné rápidamente. — ¿Dónde conseguiste eso? — Le pregunté luego de que mis intentos de búsqueda rápida con la vista no funcionaran, y mientras señalaba a lo que traía en sus manos y me paraba del asiento para ir por uno, dependiendo a donde me indicase.
Esperaba no tener que bailar, la verdad era muy mala en eso, prefería ser más del tipo de persona que estuviera tocando para que otros bailen, me gustaría aprender a tocar muchos instrumentos en sí, tal vez algún día lo haga, y deje de dar pena con la flauta dulce de mi habitación. Sabía que aunque Ekaterina, mi compañera de cuarto, no me dijera nada, no era para nada agradable los sonidos provenientes de cuando me disponía a tocar. Aunque una vez me felicitó por tocar el bajo, al parecer en eso si era buena. Me distraje en esos pensamientos un momento, tal vez si me hubiera respondido a lo anterior no me había dado cuenta, por lo que lo miré esperando respuesta.
— ¡¡Hola!! de nuevo. — Dije comenzando animada y luego lo otro en voz baja. — Un gusto, Ulrich. Soy Cristie Schmidt. — Agregué con una sonrisa. Y luego de meditarlo por un momento. — ¿Cómo estás? — Tal vez podía empezarlo como un chat, solo que hablando, aunque lástima que en una conversación no se pudieran poner mis lindos emoticones. En fin, esto era un intento.
Aún seguía teniendo sed, por lo que al terminar de decir eso, solo me agarré la garganta en reflejo, buscando donde podría conseguir algo para tomar. — Por cierto. — Mencioné rápidamente. — ¿Dónde conseguiste eso? — Le pregunté luego de que mis intentos de búsqueda rápida con la vista no funcionaran, y mientras señalaba a lo que traía en sus manos y me paraba del asiento para ir por uno, dependiendo a donde me indicase.
Esperaba no tener que bailar, la verdad era muy mala en eso, prefería ser más del tipo de persona que estuviera tocando para que otros bailen, me gustaría aprender a tocar muchos instrumentos en sí, tal vez algún día lo haga, y deje de dar pena con la flauta dulce de mi habitación. Sabía que aunque Ekaterina, mi compañera de cuarto, no me dijera nada, no era para nada agradable los sonidos provenientes de cuando me disponía a tocar. Aunque una vez me felicitó por tocar el bajo, al parecer en eso si era buena. Me distraje en esos pensamientos un momento, tal vez si me hubiera respondido a lo anterior no me había dado cuenta, por lo que lo miré esperando respuesta.
- OFF:
- Sorry por la tardanza uwu
Invitado- Invitado
Re: Baile en la noche
Desvíe un poco la mirada por la vergüenza que sentía al socializar, definitivamente esto no era lo mío, pero rendirme tampoco lo era así que seguiría intentando mantener una conversación con ella -Cristie. Es un lindo nombre, tu apellido también es lindo- contesté con una sonrisa a pesar de que a mis adentros me había golpeado a mi mismo, a mi parecer, esa frase había sonado redundante y lo del apellido podía sonar un tanto despectivo visto del ángulo correcto, aunque al parecer ella estaba concentrada en algo más -Pues estoy bien, es la primera vez que salgo entre tantos proyectos- ¿proyectos, como los que hacía para la pobre chica cuyo único poder consistía en crear un arcoiris al decir su nombre de heroína? ¿O quizás los que hacía para mi mismo con el fin de entretenerme debido a la poca vida social que tenía? Mejor aún, los que no involucraban el uso de mi magia, si, esos que no existían debido a lo vago que soy y lo difícil que es manejar maquinaria con unos brazos como los míos.
Durante mi ataque de nervios y mi parálisis por análisis, pude notar que la chica tenía sed por los gestos que me hacía, por suerte salí de mi trance justo cuando abrió sus labios para hablar -Oh, esto. Allí- señale la pequeña barra, justo al otro lado de las parejas que tan bailaban de forma tan romántica, traté de mantener una sonrisa a pesar de que mi pena me hiciera tener cara de perrito regañado. Si me había preguntado por los proyectos o no, quizás no me daría cuenta hasta que repitiera la pregunta, después de todo me había abstraído tanto en mis pensamientos y en la búsqueda de excusas que no me había dado cuenta de muchas cosas a mi alrededor, como por ejemplo ¿cuando habían empezado a bailar las parejas? ¿De verdad me saludó dos veces o estoy desarrollando alguna enfermedad mental ante tanta falta de comunicación?
Mientras ella salía a por algo de tomar, me quedé pensando en mi situación, sobre lo que tendría que hacer con respecto a mi identidad, y más importante aún, sobre lo que tendría que hacer con respecto a tanto ser sobrenatural en la academia. ¿Era seguro revelar los dones que tenía? La historia detallaba que en efecto los brujos eran cazados por sus relaciones con el diablo, por más que mi caso fuese totalmente el opuesto considerando la enorme cantidad de suerte que logré tener hasta ahora. Los únicos bravucones que conocí hasta ahora habían recibido una descarga eléctrica, las personas que conocía eran agradables y hasta ahora nadie se había dedicado a arruinar mi día 24/7. ¿Acaso todo cambiaría si llegaban a enterarse que era un mago? Shelly no sintió mucha pena en mostrarme sus dotes (los enormes dientes de vampiresa), por así decirlo.
Continué tomando de la lata hasta que se agotara, y una vez hecho aquello escondí el contenedor en mis manos, musitando de forma inaudible un hechizo para hacer que el contenedor transmutara en una rosa plateada, algo que realicé con sumo cuidado de que nadie me estuviese observando debido al hecho de que quería que solo ella supiera aquel detalle cuando me atreviera a decirlo, y eso solo si ella resultaba no ser tan "humana" al igual que yo.
Durante mi ataque de nervios y mi parálisis por análisis, pude notar que la chica tenía sed por los gestos que me hacía, por suerte salí de mi trance justo cuando abrió sus labios para hablar -Oh, esto. Allí- señale la pequeña barra, justo al otro lado de las parejas que tan bailaban de forma tan romántica, traté de mantener una sonrisa a pesar de que mi pena me hiciera tener cara de perrito regañado. Si me había preguntado por los proyectos o no, quizás no me daría cuenta hasta que repitiera la pregunta, después de todo me había abstraído tanto en mis pensamientos y en la búsqueda de excusas que no me había dado cuenta de muchas cosas a mi alrededor, como por ejemplo ¿cuando habían empezado a bailar las parejas? ¿De verdad me saludó dos veces o estoy desarrollando alguna enfermedad mental ante tanta falta de comunicación?
Mientras ella salía a por algo de tomar, me quedé pensando en mi situación, sobre lo que tendría que hacer con respecto a mi identidad, y más importante aún, sobre lo que tendría que hacer con respecto a tanto ser sobrenatural en la academia. ¿Era seguro revelar los dones que tenía? La historia detallaba que en efecto los brujos eran cazados por sus relaciones con el diablo, por más que mi caso fuese totalmente el opuesto considerando la enorme cantidad de suerte que logré tener hasta ahora. Los únicos bravucones que conocí hasta ahora habían recibido una descarga eléctrica, las personas que conocía eran agradables y hasta ahora nadie se había dedicado a arruinar mi día 24/7. ¿Acaso todo cambiaría si llegaban a enterarse que era un mago? Shelly no sintió mucha pena en mostrarme sus dotes (los enormes dientes de vampiresa), por así decirlo.
Continué tomando de la lata hasta que se agotara, y una vez hecho aquello escondí el contenedor en mis manos, musitando de forma inaudible un hechizo para hacer que el contenedor transmutara en una rosa plateada, algo que realicé con sumo cuidado de que nadie me estuviese observando debido al hecho de que quería que solo ella supiera aquel detalle cuando me atreviera a decirlo, y eso solo si ella resultaba no ser tan "humana" al igual que yo.
Invitado- Invitado
Re: Baile en la noche
Oh enserio esto de socializar lo sentía mal, bueno mi intento, al menos sentía que el ambiente estaba medio tenso aquí, no sé porque y era un poco mi culpa porque no sabía de qué hablar con Ulrich solo le pregunté por agua y nada más. Tal vez podría preguntarle por otras cosas, pero quien sabe si no sería muy grosero para alguien que acabo de conocer. Vi cómo me señaló a donde estaban las bebidas. — ¡Sí! Gracias, emh, dame unos minutos, por favor. — Y fui corriendo por una bebida, una coca cola o cualquier cosa que encontrara.
Pedí mi bebida, pero desde donde estaba podía verlo, espero no haya sido muy grosero irme así no más corriendo. Aunque tuviera puesto un vestido, no era nada difícil hacerlo, pero en fin. Cuando recibí mi lata de coca cola, volví corriendo de la misma manera, esquivando ahora a la gente que se había puesto a bailar de nuevo. — Listo. Lo siento mucho por irme así. — Dije sentándome de nuevo a su lado, mientras abría la lata de gaseosa y me llevaba un poco a la boca, para poder refrescar al fin mi sed. — Ahh, al fin. Lo siento de nuevo tenía mucha sed. — Con eso me callé un momento mientras jugaba con la lata en mis manos.
El color rojo de la lata me recordaba a Sam, el por qué no sé. Seguro porque siempre que hablábamos por chat, el usaba ese color de texto, sonreí un poco y recordé porque estaba aquí, claro. Miré a Ulrich para ver que hacía y poder iniciar otra conversación menos frustrante por no saber que decir. — Y… dime Ulrich, si no te importa, emh, ¿cómo te animaste a entrar en este tipo de evento? — Pregunté esperando no sea muy molesto hacer ese tipo de cuestiones a otras personas.
Solo me recordaba mi razón de venir aquí, no esperaba una pareja, solo distraerme y pasar el rato para distraerme de ciertas cosas que pasaban en mi vida en esos momentos. Solo esperaba que Sam y Eka se estuvieran divirtiendo algo, y que quien sea estuviera con Sam no sea muy inoportuno… Pero no, no debía pensar en eso ahora. Miré de nuevo a Ulrich pero con una sonrisa a ver si así le inspiraba confianza para que me responda.
Pedí mi bebida, pero desde donde estaba podía verlo, espero no haya sido muy grosero irme así no más corriendo. Aunque tuviera puesto un vestido, no era nada difícil hacerlo, pero en fin. Cuando recibí mi lata de coca cola, volví corriendo de la misma manera, esquivando ahora a la gente que se había puesto a bailar de nuevo. — Listo. Lo siento mucho por irme así. — Dije sentándome de nuevo a su lado, mientras abría la lata de gaseosa y me llevaba un poco a la boca, para poder refrescar al fin mi sed. — Ahh, al fin. Lo siento de nuevo tenía mucha sed. — Con eso me callé un momento mientras jugaba con la lata en mis manos.
El color rojo de la lata me recordaba a Sam, el por qué no sé. Seguro porque siempre que hablábamos por chat, el usaba ese color de texto, sonreí un poco y recordé porque estaba aquí, claro. Miré a Ulrich para ver que hacía y poder iniciar otra conversación menos frustrante por no saber que decir. — Y… dime Ulrich, si no te importa, emh, ¿cómo te animaste a entrar en este tipo de evento? — Pregunté esperando no sea muy molesto hacer ese tipo de cuestiones a otras personas.
Solo me recordaba mi razón de venir aquí, no esperaba una pareja, solo distraerme y pasar el rato para distraerme de ciertas cosas que pasaban en mi vida en esos momentos. Solo esperaba que Sam y Eka se estuvieran divirtiendo algo, y que quien sea estuviera con Sam no sea muy inoportuno… Pero no, no debía pensar en eso ahora. Miré de nuevo a Ulrich pero con una sonrisa a ver si así le inspiraba confianza para que me responda.
Invitado- Invitado
Re: Baile en la noche
Una vez que ella se fue, me coloqué los casos para escuchar una canción de mi móvil, sin darme cuenta, había empezado a mover mi cabeza y marcar el ritmo con mi pie, que al cansarse pasó el ritmo a la extremidad adyacente para finalmente compartir la carga, mis hombros empezaban a moverse y sin darme cuenta mi cuerpo entero ya estaba moviéndose al ritmo de la canción, como si todo fuera cuestión de instinto.
De haberme visto, la chica probablemente pensaría que estaba loco y que era todo un extrovertido sinvergüenza o algo por el estilo, pero los -enormes- cascos que cargaba daban la clara señal de que estaba escuchando música, y lo normal de escuchar música es dejarse llevar por ella ¿no? tenía esta canción en mi mente desde hace varios días junto a otras de Bon Jovi, y como consecuencia, se podría decir que estaba un poco mas valiente de lo normal, si era mas carismático ya dependería de otras personas, el punto era: Cuando escuchaba este tipo de canciones revelaba al Ulrich que solo se mostraba cuando usaba magia, el Ulrich que era confiado, orgulloso y tan radiante como su cabello (... ¿Acabo de hablar en tercera persona? Oh well). Me quité los cascos al verle volver, recibiéndole con una amplia sonrisa -Descuida, ya me acostumbré a ese tipo de cosas.- mencioné en un tono que hacía un total contraste con lo deprimente que era aquella frase.
Empecé a jugar con la metálica rosa que tenía en mis manos, pasándola de un nudillo a otro o incluso colocandola sobre mi oreja mientras el silencio nos invadía, al igual que ella, estaba pensando en un tema de conversación y si era sabio el rebelarle que era un mago, aunque vamos, mi cambio de humor parecía tan extremo que sonaba como si hubiese ocurrido por arte de magia -Mi psiquiatra dijo que necesito hacer amigos- mencioné al aire mientras me sacaba la flor del cabello, riendo un poco ante lo que había dicho, ahora creería que de verdad estaba enfermo -Miento. Aunque es cierto que no soy muy social..- continuaba jugando con la flor, discretamente haciendo que su textura fuese más y más similar a la de una flor de verdad, doblando las partes filosas con mis dedos para evitar que alguien se lastimara al jugar con ella como yo lo hacía, en ello bajé la mirada y mantuve una expresión seria -Podría decirse que la idea de distraerme y conocer a alguien más fue lo que me atrajo. La idea de que por cuestión de azar llegase a conocer a alguien con problemas similares a los míos sonaba como el inicio de esos cuentos que me leía mi nana cuando regresaba de clases con mis juguetes rotos o la mochila quemada.- vaya que esto había tomado un giro oscuro y bizarro, ¿de hablar de cuentos de hadas a hablar de bullying..? largo salto por mas que el contexto lo hiciera parecer algo de un solo paso.
Apoyé mi brazo en mi rodilla y mi mentón en mi palma de modo que mis dedos quedaran sobre mi mejilla, mirándole con una sonrisa similar a la que ella me estaba entregando -Si no te molesta que pregunte.. ¿Y a ti, que te motiva a estar aquí? Créeme, no soy quien para juzgar- incliné un poco mas mi cuerpo para rascarme el cuello, desviando la mirada tras soltar aquel comentario, al erguirme de nuevo acomodé mi cabello, revelando por unos segundos la forma en la que mi rostro lucía frecuentemente antes de peinarme de nuevo. Tomé un poco mas de valor y miré a los lados, mostrandole la flor metálica que flotaría sobre mi mano por unos segundos, girando y desdoblándose para volver a su antigua forma (Revelando que solía ser una lata de Pepsi) antes de regresar a la que le había dado, lo cual arriesgaría que cualquiera en la habitación pudiese ver mi magia -Yo también guardo secretos, aunque me estoy cansando de ello- no podía creer lo que había dicho, y quizás lo lamentaría en cualquier momento; estúpida y genial música, cambiando drásticamente mi forma de pensar y actuar.
De haberme visto, la chica probablemente pensaría que estaba loco y que era todo un extrovertido sinvergüenza o algo por el estilo, pero los -enormes- cascos que cargaba daban la clara señal de que estaba escuchando música, y lo normal de escuchar música es dejarse llevar por ella ¿no? tenía esta canción en mi mente desde hace varios días junto a otras de Bon Jovi, y como consecuencia, se podría decir que estaba un poco mas valiente de lo normal, si era mas carismático ya dependería de otras personas, el punto era: Cuando escuchaba este tipo de canciones revelaba al Ulrich que solo se mostraba cuando usaba magia, el Ulrich que era confiado, orgulloso y tan radiante como su cabello (... ¿Acabo de hablar en tercera persona? Oh well). Me quité los cascos al verle volver, recibiéndole con una amplia sonrisa -Descuida, ya me acostumbré a ese tipo de cosas.- mencioné en un tono que hacía un total contraste con lo deprimente que era aquella frase.
Empecé a jugar con la metálica rosa que tenía en mis manos, pasándola de un nudillo a otro o incluso colocandola sobre mi oreja mientras el silencio nos invadía, al igual que ella, estaba pensando en un tema de conversación y si era sabio el rebelarle que era un mago, aunque vamos, mi cambio de humor parecía tan extremo que sonaba como si hubiese ocurrido por arte de magia -Mi psiquiatra dijo que necesito hacer amigos- mencioné al aire mientras me sacaba la flor del cabello, riendo un poco ante lo que había dicho, ahora creería que de verdad estaba enfermo -Miento. Aunque es cierto que no soy muy social..- continuaba jugando con la flor, discretamente haciendo que su textura fuese más y más similar a la de una flor de verdad, doblando las partes filosas con mis dedos para evitar que alguien se lastimara al jugar con ella como yo lo hacía, en ello bajé la mirada y mantuve una expresión seria -Podría decirse que la idea de distraerme y conocer a alguien más fue lo que me atrajo. La idea de que por cuestión de azar llegase a conocer a alguien con problemas similares a los míos sonaba como el inicio de esos cuentos que me leía mi nana cuando regresaba de clases con mis juguetes rotos o la mochila quemada.- vaya que esto había tomado un giro oscuro y bizarro, ¿de hablar de cuentos de hadas a hablar de bullying..? largo salto por mas que el contexto lo hiciera parecer algo de un solo paso.
Apoyé mi brazo en mi rodilla y mi mentón en mi palma de modo que mis dedos quedaran sobre mi mejilla, mirándole con una sonrisa similar a la que ella me estaba entregando -Si no te molesta que pregunte.. ¿Y a ti, que te motiva a estar aquí? Créeme, no soy quien para juzgar- incliné un poco mas mi cuerpo para rascarme el cuello, desviando la mirada tras soltar aquel comentario, al erguirme de nuevo acomodé mi cabello, revelando por unos segundos la forma en la que mi rostro lucía frecuentemente antes de peinarme de nuevo. Tomé un poco mas de valor y miré a los lados, mostrandole la flor metálica que flotaría sobre mi mano por unos segundos, girando y desdoblándose para volver a su antigua forma (Revelando que solía ser una lata de Pepsi) antes de regresar a la que le había dado, lo cual arriesgaría que cualquiera en la habitación pudiese ver mi magia -Yo también guardo secretos, aunque me estoy cansando de ello- no podía creer lo que había dicho, y quizás lo lamentaría en cualquier momento; estúpida y genial música, cambiando drásticamente mi forma de pensar y actuar.
Invitado- Invitado
Página 1 de 1.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.
Vie Abr 10, 2020 7:14 pm por Ekaterina Akeila
» Registro de Físicos [Postear con ficha Aceptada]
Sáb Mayo 30, 2015 4:43 pm por Invitado
» Especialidades para universitarios
Sáb Mayo 30, 2015 12:57 pm por Ekaterina Akeila
» Fairy Tail ¡Fire Up! || Afiliacion || Normal
Jue Abr 09, 2015 8:58 pm por Invitado
» Me voy.
Lun Abr 06, 2015 9:57 pm por Invitado
» Infamous {Normal}
Sáb Abr 04, 2015 6:35 am por Invitado
» Sueños de Arianth {Afiliado normal}
Jue Abr 02, 2015 8:10 am por Invitado
» Nos veremos
Miér Abr 01, 2015 8:07 pm por Invitado
» Gran Baile -Colectivo-
Miér Abr 01, 2015 2:55 pm por Invitado
» Búsqueda del Tesoro {Bases}
Miér Abr 01, 2015 2:08 pm por Ekaterina Akeila