Que dirian los pajaros que vuelan [priv. Leone]

por Invitado Dom Dic 08, 2013 8:31 am

Era Lunes por la mañana y ese día me desperté muy temprano ya que el día anterior fue muy ajetreado porque estuvo como un poco de fiesta bebiendo y divirtiéndose y cuando llego a su casa se puso a trabajar y hacer cuentas de sus finanzas por lo que se canso y decidió irse a dormir antes de lo habitual, para asi poder el día siguiente estar mas lleno de energía ya que tenia pensado investigar la academia, la cual no conocía aun muy profundamente . Ese día despertó con energía por lo que se dio una buena ducha y salio con nuevas y limpias ropas sensuales que hacían que se le viese mas sexy de lo habitual. Se lavó y se puso una colonia de olor a rosas silvestres disponiéndose a salir a dar un paseo por el bosque antes de ir al teatro.
Salio de la casa con energía y entusiasmo, ya que repuso fuerzas en su merecido descanso la noche anterior, cerrando la puerta con un candado y dirigiéndose a pasear en dirección hacia el bosque.

El iba paseando tranquilamente e incluso se paro en una heladería en la cuál se dispuso a pedirse un helado de chocolate, que se puso a tomar tranquilamente mientras iba al bosque. Termino el helado por lo que tiro el papel a la basura y se adentro en el bosque en el cual pudo ver y divisar animales, mamiferos y aves, que alegraban a la vista y el oído, aun asi siguió firme y tranquilo, caminando felizmente por el bosque.

Usui iba caminando por el bosque hasta que se aburrió y decidio volver, retomando el camino, observando y sonriendo ante los animalillos que alli encontraba.
Salio del bosque y se estiro observando el prado verde y el lago en el cual se baño y en el cual se mantuvo un rato refrescándose aunque no hiciese calor. Torno y salio del agua secándose y volviéndose a vestir dirigiéndose a la academia, como tenía ya pensado desde el día anterior.

Entre al lugar con una notable felicidad en su rostro y se dispuso a caminar tranquilo por el lugar investigando cada rincón de la academia....
Paso por el teatro, la enfermería etc... y en la cocina se dispuso a entrar observando atentamente la vajilla y los diversos objetos que alli había.
El lugar era bastante grande con unas paredes de un color claro y blanquecino,cubierto con baldosas blancas que estaban tan limpias y brillaban tanto que te podías reflejar en estas si quisieras, funcionando esta como "espejo" casi perfecto.

Vi las tambien brillantes vajillas y las encimeras hechas de granizo lisado y me decidi a ir a la despensa, bajando por las escaleras de una puerta que se encontraba al fondo de la cocina a coger diversos ingredientes que necesitaba para probar la cocina. Tome los ingredientes necesarios y subi de nuevo las escaleras cargando los ingredientes en mis brazos por lo que los deje en la encimera de granito y me lave bien las manos con jabon para empezar a cocinar.

Tome los "instrumentos" de cocina necesarios y me dispuse a mezclar ingredientes para preparar una masa de pizza. Tome unos pimientos y cebolla y lo pique en trozos pequeños, también tome atún, anchoas pollo y espinacas dejando en pollo cortado taquitos. Tome unos tomates y los triture para después freírlos junto con la cebolla y ponérselos a la masa junto con los demás ingredientes, queso y orégano.
Lo metió en el horno que habría calentado ya antes y espero un rato a que se terminara de hacer por lo que cuando salio la puso en un plato y la corto en porciones.

Me dirigí a comer mas comodamente a el mirador ya que tenia preciosas vistas y empeze a tomas la pizza del plato mirando felizmente al horizonte

por Invitado Lun Feb 24, 2014 4:48 am

Salió de clases y se despreocupó de sus deberes, estaba harto ya de fingir que todo esto le importaba como para prestar atención y tiempo en ello. Dejó sus cosas en un sitio seguro y se dispuso a caminar por la academia, ganas de ir a la ciudad tampoco tenía.

Leone nuevamente había ido directamente a la azotea, esta vez, solo fué a descansar un poco y no a fumar como ya era costumbre. Estos últimos meses, muchas cosas le sucedieron al italiano, por lo que además de vagar, aprovecharía para meditar ciertas cosas. La calma del sitio, provocó somnolencia que terminó en un profundo sueño para Leone, durmió unas horas plácidamente y solo se despertó al sentir frío, puesto que solo estaba con la camisa y no con el Cardigan destinado a los gamma, solo su corbata expone su "clase" dentro de esta institución. Un poco desorientado, bosteó y rozó los puños con sus ojos para tratar de despertarse más y sentirse alerta, acto que le llevó más de lo pensado. Alzó la mirada, estaba nublado y Leone no era de quienes gustaban el frío.

Se levantó y sacudió los pantalones, abotonó su camisa dejando solo un ojal sin su botón, caminando en dirección a la entrada al edificio, pero se detiene y repara en el piso superior, aquel destinado a ser el observatorio, ¿Alguna vez había subido allí?. Nunca. Era momento de saciar su curiosidad, por lo que cambió la dirección a seguir y fué a la escalera que le conectaba con tal sitio, subiendo prontamente, al menos allí podría mitigar en parte el frío. Si es que estaba abierto. Mientras se acercaba, su mirada se fijó el la puerta frente a él, aquella estaba abierta y eso causó una escasa sonrisa, la cual se borró conforme se acercaba. Empujó la puerta e ingresó lentamente.

Un aroma extraño llegó a su nariz, frunció el ceño, notó que no estaba solo. La luz encendida y ese olor, cerró la puerta tras de si y avanzó, buscó con la mirada y no demoró en ver la silueta de un hombre. Leone caminó hacia aquel, pudiendo apreciar mejor sus rasgos a medida que se acercaba. Su rostro se veía serio, quizás aún adormilado y mencionó con una voz un poco más baja de lo normal - ¿Interrumpo alguna cosa importante? - relajó su expresión, mirando al tipo y luego el entorno, no se veía más gente que él y aquel. - No parece ser alguna reunión especial... - alzó la zurda y se rascó la cabeza, desordenando sus cabellos aún más de lo que ya estaban. - como sea... ¿Te molesta si me quedo un rato?, tengo frío. - algo seco al hablar, pero realmente sintió mucho frío. Anhelaba café.

por Invitado Jue Feb 27, 2014 8:55 am

Estaba yo tan tranquilo, tomando mi pizza, sin nada en que pensar, solo en que sería de mi futuro y que ocurriría posteriormente. Tomaba mi pizza, deliciosa y la cual despredía un agradable olor y ya iba por la mitad, escuche un sonido de pasos por las escaleras, y tras esto un abrir de la puerta que estaba tras el, a su espalda y a unos pocos metros. Sintio el aroma de un hombre, aunque ni se dio la vuelta, pues al parecer, por el sonido de sus pasos, se acercaba a su persona. Al verlo a su lado lo observo de un vistazo, al parecer era mayor que Usui y ademas, no estaba nada mal, un buen cuerpo y un lindo rostro pero... ¿Caería bien a Usui?

Escuche sus palabras, sonriendo con levedad y mirandolo, atento y medio adormilado aun, pasaría un rato con el aire y la pizza para volver a la normalidad.
-Tranquilo joven, no interrumpe nada...- Dije de manera algo fria, era asi cuando estaba con sueño y no lo podía remediar, aunque por educación, termino de escuchar sus palabras. -Etto... claro quedate... y si tienes frío...- Toma un trozo de pizza y se lo ofrece a el rubio -Toma esto, aun esta algo caliente...si no, siempre puedes quedarte mi chaqueta chico- Si, había cambiado algo de golpe, sus varios polos lo provocaba, podía pasar de ser un uke moe, a ser un sanginario que mata al primero que se le cruza, ademas del sueño, que hacía a los estados del rubio, ser menos regulares.

Lo mire, esperando tal vez una respuesta o reacción por su parte y espere terminando de comer mi pizza, dejando un trozo mas para el rubio y tras ello sentandome en la barandilla de seguridad del sitio, quedandose mirando al otro rubio, algo fijamente y aun de una manera fría por lo que sin apenas pensarlo y para "despertar" algo mas rapido, saco de un bolsillo interior de la chaqueda una botella de whisky, sacando una copa y llenandola, para acabar bebiendola del tiron y volviendo a guardar ambos items. Sonrei, ya algo mas animado y despierto y mire de nuevo al joven.
-Bueno...aun no me a dicho usted su nombre caballero-

por Invitado Miér Ago 13, 2014 12:29 am

La forma en que el otro le habló le causó curiosidad, le hizo sentir extraño ya que no estaba acostumbrado a ese tono educado, aún así Leone no hizo seña de su extrañeza. Le observó con asombro cuando le ofreció comida — que amable... — eso le sacó una sonrisa amistosa, comer algo a esta hora le sentaba más que bien, además podría mitigar ese vacío que sentía en su estómago. Recibe el trozo de pizza y le da un gran mordisco, procuró tener cuidado con el queso que seguro le ensuciaría la ropa, pero no estaba tan derretido como para mancharle. — ¿en serio me pasarías tu chaqueta? — preguntó con diversión, no sabía si la prenda ajena le quedara bien, pero no se la pediría ya que Leone le impregnaría su peculiar aroma (tabaco).

— No te preocupes, con tener algo caliente aquí ya es algo...— terminó de comer su trozo de pizza con bastante entusiasmo, vió como el contrario se alejó y observó luego el otro trozo de pizza, casi adivinando, lo tomó y comió dichoso. — Gracias por la comida, me has salvado... — comentó sincero, coge una servilleta que vió sobre la mesa y se limpia la boca. — oh, ¿tienes sed, eh? — volvió a sonreír mientras se encaminó a donde aquel estaba. — ante tal cortesía, supongo que puedo presentarme... — se aclaró la garganta y prosiguió — Soy Leone Raphael D'Agostinni — extendió la diestra hacia el otro rubio — ¿cómo te llamas? — secundó. Esperó un tiempo prudente y agregó — ¿En qué grado vas?... Segundo... tercero tal vez? — cuestionó, aquel hombre no se veía mayor que el italiano.

Se queda al lado del chico, apoya sus manos en el barandal y observa el cielo que se iba tiñendo poco a poco de un color anaranjado, era una bella tarde sin duda. Leone aún así, tenía frío, alguien como él solía andar desabrigado, necesitaba entrar en calor — oye... ¿qué era lo que bebías? podrías convidar a alguien friolento como yo... — preguntó puesto que al estar próximo al otro, un aroma a licor se apreciaba con intensidad. No tenía vergüenza con pedirle, si le decía que no simplemente se quedaba así, sin tomar, no le afectaría como a otros. Hay que mencionar que Leone pese a tener aguante moderado con el licor, solía ser más "amistoso" con esa sustancia en el organismo, por lo que tratará siempre de no excederse.

Le dedicó una fija mirada, le analizó mejor y con descaro, Leone no tenía reparos en escrutar el cuerpo y rostro de otros. Suspiró bajo y regresó la mirada al horizonte, entrecerró los ojos ya que aún le llegaban rayos del sol, era molesto ¿Dónde carajo habían quedado sus gafas?, lo ignoraba.

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